Como siempre que ha ocurrido esto de las histerias por epidemias, la población regiomontana se ha volcado a las farmacias y cualquier centro comercial en donde se venda las mascarillas cubre bocas del tipo N95, y han ocasionado que este producto se agote en su totalidad.
Incluso la venta de un famoso desinfectante en aerosol que contiene una combinación de cloro y alcohol ya se está reportando casi agotado este producto en varios centros comerciales del área metropolitana de Monterrey, y todo esto por el pánico de las personas ante el coronavirus COVID-19.
Lamentablemente esto ha causado que los distintos centros médicos de la ciudad, así como laboratorios clínicos y hospitales tengan un desabasto de estos productos, necesarios para ellos en sus múltiples procedimientos que realizan en donde requieren de seguir muy completos y complejos protocolos de sanidad e higiene.
Incluso algunos “comunicadores” malamente ya estaban especulando con la suspensión de clases en las escuelas por este motivo, cosa que no es real; la vida en la gran metrópoli regiomontana puede seguir en paz y tranquilidad de momento, pues no hay ningún caso de este padecimiento en personas de la localidad, y ya se están implementando protocolos para que si se llegara a presentar un caso, proceder con todas las medidas pertinentes.
Lamentablemente la gente, la masa, no entiende esto y prefieren lanzarse a las compras de pánico sin pensar que lo que están haciendo es un gasto innecesario. La mejor manera para prevenir el contagio del coronavirus chino es evitar cualquier contacto directo con personas que hayan viajado recientemente a China, Japón, Corea e Irán y que estén presentando síntomas de resfriado.
Se ha señalado la gran importancia de cumplir cabalmente con todas las prácticas de higiene y salubridad en el hogar y en el trabajo, ya que se sabe que este virus puede ser destruido por medio de varios agentes de limpieza como el jabón, el alcohol y el cloro, por lo que se ha hecho gran hincapié en mantener la higiene personal como prioridad principal.
Tenemos la experiencia de la anterior epidemia de influenza, en la cual surgieron cientos de teorías conspirativas, las cuales fueron descartadas totalmente. De nuevo, se hace el señalamiento de no poner atención a todas las especulaciones sobre este virus, pues son falsas todas ellas. El negocio de los alarmistas vuelve a tener un nuevo objeto para lucrar con el temor y la ignorancia de la gente, y no debemos permitir que esto ocurra.
Solo hay dios casos confirmados del coronavirus chino COVID-19, pero en ambos casos los pacientes son reportados delicados pero estables. Se sabe que tiene gran diferencia con una gripa fuerte, pero su sintomatología puede ser llegar a ser más severa en ciertas personas con bajas defensas, gente de la tercera edad, con enfermedades crónicas o con algún grado de obesidad. Por lo que recomienda no escatimar en precauciones, pero sin caer en pánico o histeria.
Incluso muchos lo han tomado a broma, pues la legendaria resistencia de los mexicanos a varias enfermedades que en otros lugares son muy delicadas, los ha llevado a generar varias bromas al respecto de este virus. Incluso en España una persona maneja una cuenta de Twitter donde se supone que es el virus quien narra sus aventuras por el mundo mientras infecta a las personas con un tono sarcástico y algo de humos negro.
No es para caer en el pánico, ni para confiarse, pongamos este tema en las manos de los médicos y los farmacólogos quienes serán quienes le darán una correcta solución a este nuevo patógeno que tanto ha dado de que hablar en el mundo en estos últimos días.
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