Sin embargo, es lastimoso que, inmediatamente después de un evento de esta magnitud y que ha tenido una gran cobertura mediatica, surjan de sus cloacas individuos siniestros, y hasta maquiavélicos, que se ponen a difundir sus corrompidas y torcidas ideas con tal de impregnar a las población de incertidumbre, temor y desasosiego.
Ya circulan en la red cientos de comentarios que hablan de que este terremoto fue parte de lo anunciado de las profecías mayas del fin del mundo, el cual, según los timadores, ocurrirá el 21 de diciembre de este año. Hay que recordarles que esas supuestas profecías mayas, en realidad no existen, son falsas, fueron inventadas por un estadounidense líder de un grupo pseudo-místico llamado José Argüelles en el año de 1984, para dar más credibilidad a sus ideas. Pero los historiadores, arqueólogos e investigadores mexicanos ya han desenmascarado ese engaño. Desgraciadamente, esta noticia, de que esas falsas profecías mayas ya fueron desenmascaradas, no les ha llegado a todos, así que aquí se las recordamos.
Es lamentable que incluso los odios y fanatismos religiosos utilizan estos eventos para promover esas ideas funestas y astrosas contra otros. Solo por mencionar, una “artista” muy “religiosa” publicó: “Este sismo es el comienzo, de entender que vienen muchas cosas, fuertes y es el principio, de la limpia que Cristo, hará con la gente mala”. Por lo que se ve los millones de habitantes de esa zona son la gente mala a las que ella se refiere, ahora comprendo porque muchos ya no la quieren.
Se ponen la camiseta de “religiosos” o conocedores de la Biblia, pero se dedican a corromper y vejar esos escritos tan sagrados para muchos, con tal de satisfacer su necesidad de echar pestes contra los desafortunados y los que no tengan las mismas creencias que ellos. Eso no tiene nada de religioso, por eso luego surgen los odios interreligiosos entre distintos grupos, pues ciertos “feligreses” abren la boca sin usar el cebero, y mucho menos su corazón, antes de proferir sus barrabasadas apocalípticas y catastróficas.
Hay quienes afirman que se vieron varios chemtrails sobre la zona del sismo, pero recordemos que los rastros químicos no son peligrosos, ni representan un riesgo para la población, pues son solo las estelas de los aviones de turbinas que al volar a grandes alturas, condensan el vapor de agua y forman esas lineas que se ven en los cielos. No es nada extraordinario, ni algún tipo de rociado químico.
Por otro lado, nunca faltan los que son farsantes “profesionales”, esos que obtienen ganancias, en distintos ramos, de la publicación de sus mentiras. Muchos de ellos utilizan dobles caras para hacerlo, una la verdadera, que puede ser elegante y aristocrática, y la otra que es radical y extremista. Un ejemplo de esos engaños publicados por esos individuos de doble moral es esta: "Preparando las antenas HAARP para la 3 guerra mundial. Sismo de magnitud 7,9 sacude México". Como todos podemos ver, se quiere colgar de la fama mediática que tuvo el evento para causar controversia, confusión y de paso engañar con una vieja mentira que ya fue refutada.
El HAARP o Programa de investigación de aurora activa de alta frecuencia, no es ningún tipo de arma, todo lo contrario; su objetivo es estudiar las propiedades de la ionosfera, y gracias a esto poder potenciar los nuevos avances tecnológicos que permitan mejorar la capacidad de las comunicaciones y los modernos sistemas de vigilancia estratégica. No puede causar terremotos, maremotos, ni nada por el estilo, mejora la comunicación en distintos programas desarrollados por la Fuerza Aerea de EUA y la Universidad de Alaska.
Muchas de estas personas se dicen fieles a alguna creencia religiosa, hecho que terminan por tirar a la basura, basándonos en sus palabras que solo dicen gracejadas. De tarea les dejo que mediten sobre dos pequeñas frases de dos grandes sabios, uno es Rabindranath Tagore quien dijo "La verdad no está de parte de quién grite más"; y el otro es Epicteto de Frigia, quien nos iliminó con esta frase: “La verdad triunfa por sí misma, la mentira necesita siempre complicidad”.
Deja de mentir, deja de creer falsedades, y ten más ética en tus acciones.
Fuente: http://info7.mx:9000/editorial.php?id=2057