11 agosto 2019

Posverdad: El discurso de los corrompidos


Antes se decía “es un hombre de palabra” o “es una mujer de palabra”, y eso se refería a que dicha persona destacaba por sus virtudes de ser honesta, que tenía honor y dignidad. Pero hoy en día como que se va perdiendo con la crisis de valores y virtudes humanas acarreado por el surgimiento del movimiento neo-oscurantista en la sociedad actual.
Ya muy pocos tienen eso que se llamaba “palabra de honor” y prefieren recurrir a medias verdades o a la posverdad para argumentar sus ideas y sus actos. De ahí surgen los fanáticos y los grupos de odio, de ahí surge la “chusma gobernante” como le llaman algunos. Por eso la humanidad se esta yendo a la basura, porque no tienen honor ni dignidad, mucho menos son honestos o decentes. Solamente acarrean agua para su molino de ideas y creencias según les convenga.
Pongamos por ejemplo el actual movimiento “izquierdista” que hay en México y en varios países de Latinoamérica, que sus seguidores idolatran a sus líderes, tan corruptos como todos los anteriores, pero que se la pasaron atacando a los gobiernos anteriores diciendo que ellos eran la transformación y la esperanza de su país, pero al llegar al poder resultó que fueron la perdición de los mismos y solo colaboraron generando mayor corrupción y delincuencia de la que ya había, pero sus seguidores los defienden usando la posverdad aunque ellos sean los que los tiene en la pobreza.
O también como los gobernantes que se la pasan echándole la culpa a los gobiernos anteriores, de los problemas del presente, no se ponen a solucionarlos, solo a expresar sus opiniones sobre eso y seguir prometiendo que lo arreglarán, pero nunca lo hacen. Son el vivido reflejo de lo que dicen querer atacar. Por experiencia sabemos que los que hacen muchas promesas de acabar con la corrupción, y presumen de ello, terminan siendo parte de ella.
Y por eso ahora sabemos que no hay peor cosa que un jodido defendiendo al gobierno que lo mantiene jodido. Si los “chairos” (fanáticos) no pudieron progresar económicamente o socialmente en los gobiernos “neo-liberales” es sencillamente porque realmente nunca se esforzaron en trabajar para su desarrollo o porque la corrupción de ese entonces no les favorecía y requerían de otros grupos de corrupción para progresar, pues por ellos mismos no podían.
Ahora también ante la crisis religiosa que se vive en el mundo, pues los creyentes de todas las religiones principales están perdiendo cada día más feligreses, pues la gente ya no les cree a sus promesas de salvación o redención, pues esas religiones exigen una sumisión mental ante sus dogmas, y por lo mismo censuran todo intento de ser cuestionados o puestos en duda, y eso es deshumanizar a las personas, pero eso no les interesa a sus líderes, solo les interesa tener seguidores que los mantengan económicamente.
El negocio de la religión cada día esta más expuesto en el mundo, y los abusos cometidos por los pastores, ancianos, gurús o sacerdotes, cada día salen más a la luz, demostrando la corrupción y el mal que hay en esas agrupaciones. Incluso se han formado grupos de odio que buscan atacar los derechos y libertades humanas.
Es muy común ver a los grupos de odio atacando a los derechos y libertades de las comunidades LGBT en muchas partes del mundo, buscando limitar sus derechos a tener una vida libre y en paz. Muchos argumentan que dentro de esa comunidad hay excesos de sexualización, pero los excesos de sexualización los inventaron los ¨”normales”, ellos solo los adaptaron a sus tendencias. La evidencia es constatable y corroborable, un desfile del orgullo gay no es muy distinto de un desfile de carnaval, incluyendo por los participantes semidesnudos que en ambos participan.
El derecho de libertad religiosa y el derecho de libre expresión no conlleva el derecho de atacar e intentar suprimir los derechos y libertades de los demás, eso es un error. Si quieres que los demás respeten tus creencias, tú debes de comenzar por respetar las ideas distintas a las tuyas, y sobre todo, ninguna creencia puede estar por encima de las libertades y derechos de todo humano.
Algo que mucho hemos visto es a los grupos de odio atacando al derecho de las mujeres de abortar, utilizan solo falacias, sofismas, pero sobre todo la posverdad, que es el principal recurso de estos modernos grupos de odio, que lo único que les interesa es someter a todo bajo sus creencias, realmente no les interesa el defender la vida o a la familia, solo someter a todos bajo sus dogmas.
Es muy lamentable como la carencia de recursos argumentos con lógica y cordura, son hechos a un lado para dar paso a la posverdad y sus verdades a medias con carga emocional para hacer valer sus postulados. Y ante la falta de peso y valor de sus argumentos, siempre terminan usando el recurso de la descalificación personal contra quien les gana el debate.
Pero es de esperarse, son grupos de odio, no les interesa dialogar limpiamente, con honor y dignidad, solo les interesa imponer sus creencias por encima de todo y de todos. El fanatismo es una enfermedad mental que corrompe la mente y llega a podrir el alma misma.
La posverdad esta pudriendo a la sociedad, incluso mucha gente “ha dejado de creer en la ciencia” gracias a los discursos de posverdad argüidos por varios timadores que salen en los medios diciendo cosas como “la quimioterapia no cura el cáncer” cuando la evidencia real indica de forma constatable que tiene un muy alto índice de funcionalidad.
En la ciencia no se cree, se sabe de ella, pero no se cree. No se cree en el sol, se sabe que el sol existe y se sabe de sus efectos y fenómenos que genera, no necesita que se crea en el sol para existir.  
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