15 octubre 2013

Dudar y cuestionar es de humanos



A algunas personas no les gusta pensar en ello, pues ambas idead, el dudar y cuestionar, son la base de dos filosofías que postulan conceptos muy similares, aunque no iguales, los cuales no siempre son bien comprendidos por las personas, incluso las han llegado a ver como ofensivas. Son el escepticismo y el agnosticismo. Sin embargo, en lugar de verlas como enemigas, deberías de verlas como aliadas, pues gracias a ellas podrías constatar y probar la veracidad de muchas ideas o dogmas que algunos tienen preestablecidos desde hace tiempo.

Hoy sabemos que con amuletos de ramas de pirul no se curan enfermedades, o que con una "barrida de huevo" no se quitan las "malas vibras". El ser humano por naturaleza es un ser analítico e inquisitivo. ¿Por qué negarle esa facultad innata que tiene desde su nacimiento? Por ahí hay una muy sabia y muy famosa frase que dice “La verdad os hará libres”, y tiene toda la razón, es algo innegable. Pero la única forma de llegar a obtener esa verdad, o más bien, llegar a conocer esa realidad, es preguntando por ella.

Y es ahí en donde está el meollo del asunto, la única manera de salir de la inocente ignorancia con la que todos nacemos es cuestionando e indagando en esos temas que nos parecen limitantes o intrigantes, que nos generan tantas dudas y de los cuales, inteligentemente, buscamos alguna explicación posible, la cual casi siempre obtenemos gracias a múltiples pruebas y ensayos realizados sobre tal o cual tema que nos llame la atención.

Para algunos podría ser tedioso, pero es muy sano para nuestra mente ponernos a razonar sobre aquello que pareciera misterioso o inexplicable a los ojos de otros, y que solo bajo los ojos de la fe o las creencias es factible su apreciación. Pero si de algo, hoy en día, estamos seguros, es de que todo en este prácticamente infinitoy multidimensional universo tiene una explicación lógica y racional. El universo se rige por la mismas leyes, las mismas dimensiones en todo su haber, algo que para los seguidores de distintas corrientes pseudo-místicas o pseudo-espirutuales les es muy difícil de comprender, o solo no lo quieren entender.

Pero regresemos al tema del inquirir, y dejemos de momento a la bella cosmología. Si nosotros, los que dudamos y cuestionamos lo que queremos comprender, ya seamos escépticos, agnósticos o simples curiosos, preguntamos mucho sobre sus creencias, no es por molestar, es por que intentamos entenderlas y saber por que creen en ellas. Es triste ver como personas llegan a poner sus creencias por encima de lo que ellos ya saben con certeza con tal de defender algún dogma que se les ha inculcado, aunque este evidentemente sea falso e incorrecto.

Tanto el escepticismo como el agnosticismo han evolucionado con el pasar del tiempo y han mejorado su formulación y su lugar en la sociedad, muy a diferencia del negacionismo, que lo hay en todas las ideologías y que solo es una forma de necedad casi patológica. Hoy en día el escepticismo, no es el no creer en nada, sino es el exigir evidencia objetiva de afirmaciones, y en caso de haber evidencia sustentable se acepta la afirmación, mientras que los nagacionistas solo cuestionan todo para luego rechazar todos los argumentos y evidencias, aunque sean contundentes, algo muy similar a lo que ocurre con las personas que padecen del efecto Dunning Kruger...

Los fanáticos fieles a las pseudo-ciencias, y hasta de corrientes políticas radicales, alardearán de tener toda la razón en lo que digan, pero sus argumentos se desmoronan ante los hechos corroborables, de manera libre y abierta a todos. Y es ahí donde tanto escépticos y agnósticos cumplen con su labor social de servir a la humanidad, pues desenmascaran a charlatanes y timadores profesionales que solo buscan abusar y causar pánico en los inocentes.

No lo olvides, siempre pregunta, y ante lo dudoso, cuestiona y vuelve a cuestionar. No te conformes con creer en algo, busca saberlo de manera certera y concreta. Pon a prueba lo que te digan, no permitas que te deshumanicen asumiendo ideas sin cuestionarlas. Es de humanos el inquirir para refutar, o en su caso confirmar cualquier afirmación. Incluso, no me creas a mi, analízalo y pon las ideas en la balanza de la lógica y la razón, y no te quedes con una verdad particular y personal, busca la realidad que está más allá de toda verdad limitante y parcialista, y te darás cuenta de lo que es cierto.  

http://info7.mx/editorial.php?id=4060

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola estimado Sr. Belduque:
Mil felicidades por su excelente trabajo periodistico de análisis e investigación. Sin dudarlo es uno de los mejores investigadores de toda Hispanoamérica, algo que deberían de aprender muchos supuestos investigadores que se dedican a promover la desinformación sin analizarla con el rigor objetivo y profesional que usted maneja. Mil felicidades y sigan con sus triunfos.
Atentamente:
Juan Sandoval
Chile