29 mayo 2009

El deber de inquirir



Hoy casi nadie pone en duda el hecho de que no somos los únicos en el universo, además, como dicen los astrónomos, sería un enorme desperdicio de espacio. Existen evidencias de material aparentemente de origen orgánico que se ha obtenido del espacio exterior, lo que indica la posibilidad de la existencia de vida extraterrestre; el problema es que no hay evidencias sustentables de esa vida hoy en día y mucho menos de que esa vida sea inteligente.
El telescopio de la sonda Kepler ya busca planetas similares al nuestro en el espacio, mientras que un científico australiano del instituto SETI informa que ha detectado un pulso láser de presuntamente de origen extraterrestre, aunque todavía falta averiguar cual fue su fuente. Todo indicaría que la noticia de posible vida más allá de nuestro planeta estuviera a corta distancia, pero hasta el momento no ha llegado. Y pudieran pasar varios años más sin que llegue.
Algunos autonombrados investigadores o "ufólogos" siguen esperando que los ovnis fortuitos, o también llamados por algunos ovnis invisibles, les den la respuesta a esto, y siguen aferrados a un simple fenómeno visual que no es más que un error al tomar la fotografía. Olvidan que el verdadero objetivo de su búsqueda es dar explicación al fenómeno de los objetos voladores no identificados, los cuales cada día se alejan más de lo "extraterrestre", pues, hasta la fecha, no dan pruebas de tener alguna relación directa con estos.
Los presuntos contactos o comunicaciones siguen sin ser demostrables, aunque para algunos de los supuestos testigos no les interesa esto pues se escudan con la frase de "no lo puedo demostrar, pero para mí es real, y eso me basta". Y eso sería muy válido si ellos vivieran aislados en una isla desierta, pero viven en una sociedad, dentro de una comunidad, con la cual tienen responsabilidades y deberes que cumplir. Cuando se está solo y nadie le escucha no importa mucho lo que se diga o grite, pues solo es para uno; pero si se está dentro de una sociedad esas palabras tendrán cierta repercusión, que puede ser grata o no tanto para sus emisores como para sus receptores.
Y esto se pone peor si los presuntos contactados toman una actitud cerrada con la clásica frase de "Ellos ya están aquí, no me importa si me creen o no, ellos no tienen porque demostrarlo", pero quien tiene que demostrarlo es quien lo afirma, no "ellos". Lamentablemente todo indica que, hasta el momento, todo ha sido simples falsas alarmas, pues la "evidente presencia de extraterrestres en nuestro planeta" en realidad no es nada evidente. Pero eso se lo dejamos de tarea a quienes siguen afirmándolo a los cuatro vientos. Simplemente usted no les crea mientras no den pruebas de esto, pero recuerde que lo importante no es creer, lo importante es saber.
La actitud negacionista de la evidente realidad (de que no hay pruebas de todo lo que dicen) de estos fanáticos, es lo que sigue dificultando el camino de los que sí se dedican de una manera seria y objetiva al estudio del fenómeno ovni, y de otros fenómenos relacionados con el mundo del misterio. Pareciera que esta batalla por querer ver extraterrestres en donde no hay evidencias de ellos es más una manía que simple fanatismo, pero a final de cuentas son ellos los que se dan topes contra la realidad cuando se dan cuenta de que carecen de pruebas de sus argumentos.
Sería una excelente noticia que se pudiera demostrar la existencia de alguna civilización extraterrestre, pero esto no se ha dado todavía. Estos presuntos contactados que solo quieren hacer gala de sus supuestas experiencias, lo único que demuestran es la gran soledad que hay en sus vidas al grado de querer rellenarla con seres de otros mundos. No lo niego, hay casos muy respetables y admirables de presuntos contactados que han colaborado en gran medida en la investigación de estos casos, que lo hacen desinteresadamente y sin deseos de fama o poder, como otros, pero lamentablemente son pocos.
El descalificar a los que cuestionan esas hipótesis o postulados sobre la presencia en nuestro mundo de seres extraterrestres o interdimensionales es solo una estrategia aplicada por algunos "investigadores" a falta de argumentos o evidencia de esto que ellos tanto dicen. Pues, como anteriormente se ha dicho, es mucho más sencillo intentar censurar y descalificar a quien no piense igual que ellos, que dar explicaciones lógicas y racionales para justificar sus argumentos.
Recordemos que lo que menos importa en una investigación objetiva en este campo, es si se cree o no se cree en extraterrestres, lo realmente importantes que se pudiera demostrar con evidencias su existencia en el mundo, e insisto, el creer o no en ellos no influye en nada en una investigación seria y objetiva, pues las evidencias nos llevarían por si mismas a saber de su existencia, y en este caso el saber esta muy por encima del creer simplemente en ellos. Si se demuestra que no hay, se tiene que decir así, pero si llegase a existir pruebas verificables de ellos, se tendrá que decir. Hasta el momento, no hay evidencias sustentables de "ellos" en el mundo.
La próxima ocasión que te topes con personas que te digan que sí hay seres de otros mundos en nuestro planeta, pídeles pruebas y buenas explicaciones en lugar de solo permitir que te intenten adoctrinar con sus palabras de dudosa veracidad. Que no te de pena hacerlo, pregunta, cuestiona, y demuestra tu naturaleza humana inquisitiva.
Que tengas buen día.
Fuente: http://www.info7.com.mx/editorial.php?id=863&secc=19

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