11 septiembre 2008

Y no pasó nada...



Ya esta funcionando el Gran Colisionador de Hadrones, mejor conocido como "la maquina de Dios" o simplemente como el LHC, y no ha pasado nada malo, todo lo contrario la información que ha fluido de último momento es que todo va a la perfección; y por lo tanto el mundo otra vez no se acabó como algunos temían.
Es impresionante la conmoción que ha causado este imponente experimento científico que puede cambiar para siempre muchos conceptos que se tenían sobre estos temas, en especial su principal objetivo que es el generar el bosón de Higgs, llamado por muchos como "la partícula de Dios". Algunos especularon que podría generarse un hoyo negro que podría causar un terrible desastre en nuestro planeta, pero afortunadamente, y como sospechábamos muchos, no pasó nada.
Así que ya solo queda esperar que pasa si surge esa partícula o no, pero a final de cuentas aprenderemos algo sobre ello ya sin ningún temor. De todos modos, si hubiera fallado algo ya tenían todos los preparativos para enfrentar la contingencia y evitar que se convirtiera en un desastre. Más vale prevenir que lamentar. Lo más importante es que podrá ayudar a resolver algunos misterios de nuestro mundo.
Pero me puse a pensar (porque han de saber que de vez en cuando lo hago), ¿qué haríamos ante un auténtico riesgo de catástrofe mundial? Después de pasar por el momento de pánico que muchos tendrían, sería bueno pensarlo.
Irnos a otro planeta no es la solución de momento pues la tecnología desgraciadamente no esta lo suficientemente desarrollada para lograrlo, pero esperemos que unos años más sea una posibilidad factible. Y esperar a que vengan a salvarnos los "extraterrestres", sinceramente, es todavía mucho menos posible; en el supuesto y muy remoto caso de que "ellos" vinieran a invadirnos... lo más probable es que, gracias al infinito ingenio humano, al final ellos resultarían los invadidos (aunque esto no les agrade a los ufófilos y ufólatras).
Si se tratase de un asteroide gigante que fuese a estrellarse contra la tierra, tal vez habría la posibilidad de desviarlo o destruirlo antes de que llegue a nosotros, pero primero habría que detectarlo a tiempo.
Si el caso fuese de una explosión nuclear muy potente, ya sea accidental o que haya sido detonada intencionalmente, como una de 32 megatones que según tengo entendido que pudiera causar un daño global, creo que no tendríamos mucho para donde hacernos; pero "afortunadamente", tengo entendido que las más potentes armas nucleares solo llegan a los 27 megatones, que de todos modos siguen siendo muy destructivas. Si fuese alguna epidemia o peste, lo más probable es que una mega-cuarentena podría ser una solución práctica, pero no evitaría la perdida de muchas personas.
Todo esto parece temática de una novela de ciencia ficción, pero más valdría estar prevenidos para circunstancias extremas con algunas medidas extremas de prevención sin caer en pánico ni causar temor a la comunidad, recordando que la prevención es la clave para evitar calamidades. De todos modos tenemos la certeza, y digo certeza porque así se ha demostrado hasta el momento, de que mientras existan personas que anden divulgando que el mundo se va a acabar y que el fin del mundo se acerca, el fin del mundo no llegará.
Y como dijo un gran amigo mío: "Cuando el fin del mundo llegue, yo me iré a Vanegas para que no me encuentre".
Que todos tengan muy buen día.

No hay comentarios.: