No lo podemos negar, el mundo está viviendo una crisis intelectual en donde la opinión de un “influencer” tiene más peso que la de un especialista en alguna materia científica.
Y como ejemplo podemos poner toda las cascada de opiniones basura expuestas por miles de personajes deplorables que hablaron mal o en contra de las vacunas o que lo de la pandemia sólo era un fraude de las corporaciones, muchos de ellos hoy están muertos por no haber seguido las medidas de precaución sanitarias y por no vacunarse.
Hoy hasta la misma Iglesia Católica está invitando a sus feligreses a que acudan a vacunarse, a pesar de que históricamente ha sido una enemiga de la ciencia, hoy tiene que recurrir a ella ante la abrumadora realidad, sus oraciones no funcionan contra una enfermedad real y mortal.
Al principio de la vida, cuando se es niño uno sólo busca satisfacer sus antojos y deseos, en otras palabras sólo se buscan los placeres de la vida, por eso los niños buscan tanto los dulces. Con el paso del tiempo, uno madura y comprende que el comer tantos dulces no es sano, de hecho puede llegar a ser muy malo para la salud.
Con la madurez llega el conocimiento, ya no se busca comer tantos dulces, pues ahora se busca lo que sí le hace bien al cuerpo, lo que lo nutre y le fortalece. Así es la mente humana también.
Cuando se tiene una mente inmadura o tonta, sólo se busca aquellas experiencias que causan algún tipo de satisfacción que te aliviane el momento, no se piensa a futuro, no se busca algo a posteridad; pero cuando se va madurando, y llega el conocimiento, uno va buscando mejores contenidos que sean mucho más ilustrativos y constructivos para nuestra mente.
Por eso dejamos de ver caricaturas infantiles y comenzamos a ver noticias, porque buscamos lo que sí nos sirve, no sólo lo que nos satisface por un leve momento.
Así es, la gente madura e inteligente busca lo que le hace bien, mientras que la gente inmadura y tonta sólo busca lo que le da placer.
Y ahí tenemos un problema socialmente hablando, porque los videos basura de miles de influencers tienen millones de reproducciones, mientras que contenidos más importantes y con más calidad de contenido, tienen menos reproducciones, porque la masa de gente inculta no busca el conocimiento, sólo busca lo que le satisface de momento, aunque no le deje nada de provecho a futuro.
Otro ejemplo de ello es que los seguidores de la ciencia admiten cuando se equivocan y cambian de opinión según lo comprobado. Pero también está comprobado que los fanáticos de la religión nunca cambian de opinión e incluso son capaces de asesinar si no se les da la razón.
Son problemas mentales y sociales a gran escala lo que esto nos esta mostrando. El ver que el video de una chica con ropa ajustada bailando una canción japonesa que no entiende tiene muchas más reproducciones que el video de un maestro de artes plásticas o escénicas, eso te habla mucho de la pobreza intelectual de quienes se ponen a ver esos videos.
Como dijo alguien una vez, hace falta una revolución intelectual en el mundo, hace falta una nueva Ilustración, y sí, urge algo así al mundo, antes de que los tontos sigan llegando al gobierno y destruyendo el mundo.
3 comentarios:
Lo prohibido suele adquirir una propiedad reforzante. Por eso es que nada debe ser tabú ni negada su existencia en la sociedad, o más atrayente se vuelve para muchísimos.
Coincido, Belduque.
Qué onda Belduque, ¿por qué ya no has posteado?
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