Y aunque no lo crean, es una realidad. Tal y como lo dice el título de este artículo, los ovnis están en un serio peligro de extinción, para beneficio de todos, pero ¿cómo es esto? Y ¿cómo que para beneficio de todos? Pues no lo creas, a continuación, un servidor, aquí se los explica.
La historia del fenómeno ovni inicia con el avistamiento ocurrido el 24 de junio de 1947, al piloto Kenneth Arnold, quien vio nueve objetos voladores no identificados muy cerca del Monte Rainer, en Washington. Algunos aficionados, y fanáticos, del tema aseguran que los casos de avistamientos de ovnis, han ocurrido desde la antigüedad, y las supuestas pruebas de ello, son los relatos históricos que se cuentan en varias leyendas antiguas o en documentos religiosos de antaño.
Es ahí donde las bases de esa añeja ufología comenzó a tambalearse, al recurrir a los relatos religiosos y leyendas antiguas, pues ellos no pueden ser tomados como testimonios verídicos de algo real, pues solo son cuentos que eran usados para imponer alguna regla moral, dependiendo de la época y el lugar, para entretener a las personas, y en algunos casos, muy pocos, sí narraban algún fenómeno astronómico o meteorológico fuera de lo común, pero que hoy sabemos a ciencia cierta que solo fueron eso, pero que su limitado conocimiento de la naturaleza les hacía creer eso.
Los fanáticos y aficionados a los ovnis siempre ven esto como ataques a sus fantasías con extraterrestres, pero seamos realistas, si realmente se tratara de ellos, sería la más impactante noticia del mundo, en décadas. Siendo realistas, no cambiaría religiones, no afectaría al sistema económico tanto como los fanáticos creen, pues a final de cuentas solo sería el encuentro con otra civilización foránea, pero nada más, aunque fuesen muy avanzados tecnológicamente hablando. De existir en alguna parte, son solo seres que nacen, se reproducen y mueren; nada de fuera de lo natural.
Anteriormente se creía que esos presuntos ovnis eran naves extraterrestres, e incluso algunos ufólogos, pseudo-investigadores”, aseguraban que la presencia de muchos supuestos ovnis en alguna zona, era evidencia de presencia extraterrestres en el lugar. Afortunadamente, hoy sabemos que de esos cientos o miles de testimonios de avistamientos, fotografías y videos de presuntos ovnis, el 99% tiene una explicación perfectamente lógica, racional y de origen terrestre. Las explicaciones van desde aves o insectos mal enfocados, hasta avistamientos de aeronaves militares de alta tecnología, de las cuales no se pensaba que pudieran realizar ciertos movimientos aéreos, que hoy sabemos que sí se pueden realizar, gracias al estudio de la ciencias.
Y es precisamente, gracias al estudio de las ciencias que se fueron resolviendo casos, que eran casi emblemáticos para ufología, como el de Keneth Arnold, que a final de cuentas se supo que lo que él vio solo fue el vuelo de prueba de unos novedosos (para esa época) aviones de propulsión que se estaban probando. O el caso de el presunto estrellamiento de una nave es Roswell, que hoy se sabe que lo que ahí se estrelló fue un globo sonda militar espía, pero que se dejó que se creara toda la parafernalia alienígena por cuestiones de seguridad. También el caso de los presuntos ovnis vistos en Phoenix, Arizona, en 13 de marzo de 1997, todo quedó resulto al saberse que solo se trató de aviones de combate haciendo pruebas de vuelo, pero como era un astrónomo aficionado quien lo descubrió, algunos “ufólogos” quisieron silenciarlo, pues les quitaría fama al caso. Y no se diga los supuestos ovnis grabados en el espacio, que en realidad solo son chatarra espacial o pequeños asteroides. No se dejen engañar por timadores del misterio.
Hoy en día se siguen publicando en algunos portales, videos de “oleadas ovni” o avistamientos de flotillas enteras, pero no cave duda de que se ha tratado de exageraciones y en algunos casos, simples falsificaciones. Casos como los círculos de las cosechas (crop circles) hoy sabemos que solo son trucos publicitarios para atraer curiosos y vender revistas de misterios. Y no se diga de los contactados, que ninguno ha dado evidencia sustentable para que se le pueda ser timada en serio.
La tecnología ha ayudado ha desenmascarar muchos de esos trucos, lo que les ha dificultado el trabajo para los que viven de espectáculos teatrales en los que dicen que “sí hay evidencia, y ellos las tienen”, pues las evidencias son para someterlas a pruebas, y más pruebas, hasta estar completamente seguros de que son reales. De eso se trata la auténtica ufología, o al menos es lo que deberían de hacer esos investigadores, desmitificar los casos, no acumularlos y coleccionarlos.
Por eso, hoy en día los “ovnis” se están extinguiendo, pues la clasificación de objeto volador no identificado, solo se le debe de aplicar al objeto en cuestión, después de haber sido estudiado y revisado a profundidad, por eso el termino correcto parar empezar es el de presunto ovni, el cual es solo un fenómeno netamente terrestre, hasta que se demuestre, de manera sustentable, lo contrario. Nada es extraterrestre hasta que se demuestre lo contrario. Y quien presuma de ser investigador, que responda cuantos casos ha resuelto y desmitificado, y si tiene el valor de responder, entonces sí podremos hablar de investigación.
De ese 1% de casos de presuntos ovnis que, de momento, no tienen explicación, ninguno tiene la suficiente evidencia de que sea de origen extraterrestre. Y no me lo van a contar a mi, que yo más de una vez he visto un considerable número de presuntos ovnis, y les puedo asegurar que ninguno, de extraterrestre, no tienen nada. Mejor pónganse a estudiar, y dejen de creer en annunakis.
Fuente: http://info7.mx/editorial.php?id=2692
1 comentario:
Bueno como Humano respeto tus comentario pero discrepo en lo absoluto, y si asi fuera que desperdicio de espacio
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