21 noviembre 2011

Dios bendiga a los extraterrestres




Por un momento, solo por un momento, pensemos que todos esos mensajes de supuestos contactados y canalizadores fuesen ciertos, por un momento, de manera hipotética, pensemos que realmente sí tienen algún tipo de contacto con seres extraterrestres o de otros mundos. Que todos esos mensajes que nos hacen llegar son reales y que ellos nos dicen la verdad.
Aclaro, solo hagamos la suposición. Ellos quieren que los tomemos en serio y que los respetemos, bueno, ya lo lograron solo por este instante. Ahora vayamos a analizar el contenido de sus mensajes “canalizados” que, según ellos, los envían los extraterrestres, ángeles, hermanos de luz y sus maestros ascendidos. Veamos algunos.
“El cambio cósmico y planetario debe conformarse sobre la base de la asimilación profunda, interna, psicológica y mental”; “Hemos de agradecer al cosmos holográfico cuántico que nos plantee una realidad virtual tan interesante y efectiva. Con ella podemos aprender”; “El ADN se enriquece con el amor. Ese ADN no se enriquece de conocimiento ni de saber. Únicamente se enriquece del amor”.
Con todo respeto, se me hace demasiado difícil que esas palabras estén inspiradas en “seres superiores”, pues caen en demasiadas incongruencias con la realidad del universo. Para empezar, el “cambio cósmico” o del planeta no necesita para nada ser asimilado mentalmente, si fuese real el cambio del universo, solo se trataría de un evento astronómico estudiado y explicable por la ciencia. No le podemos agradecer nada al “cosmos holográfico” pues no es nada, pues la teoría holográfica del universo, solo es una teoría física que no se ha podido demostrar que sea real, y por lo que se ve, ni ellos podrían. Por otro lado, el ADN no se puede enriquecer con el amor, el amor solo es un sentimiento que no afecta el desarrollo bioquímico del ADN en ningún momento, ni de ninguna forma, lo que sí ayuda, es tener más conocimiento sobre ese tema.
Hay individuos que dicen que desde hace años entraron en contacto con “Seres Superiores procedentes de otros mundos”, por lo que asumieron la misión de avisar de los hechos que “iban a desarrollarse en el tiempo futuro” e invitar a todos los les llegaran sus mensajes a reflexionar y a cambiar de conducta para dar a sus vidas un “sentido más positivo de cara al final de un ciclo cósmico en este planeta y a una renovación en su humanidad”; mayor timo no puede haber.
Por más que intentemos tomarlos en serio, no podemos ni debemos, pues es un insulto al intelecto humano el creer en gente que se cree “elegida” o “iluminada” simplemente porque tiene el ingenio de mentir con tanta facilidad y elocuencia. Estas personas manifiestan síntomas evidentes de mitomanía, megalomanía y una desbordada soberbia.
Y si no les pones atención salen con amenazas como “El tiempo que había sido concedido a esta generación, ya se ha terminado. Todo lo que tenían que saber los hombres de la Tierra, les ha sido dicho y exhaustivamente repetido. Ya no tienen excusa y todos serán obligados a asumir sus responsabilidades. La selección ya ha sido hecha y la separación también. Según los designios divinos, recibirá quien haya dado y le será quitado a quien ha quedado sordo y ciego”; pero esto es una total falsedad.
Estos timadores alegan "las grandes Verdades han sido siempre las víctimas del escepticismo, esta negación de todo lo que escapa a la comprensión de la inteligencia humana"; pero es una vil patraña, pues el escepticismo sirve para descubrir la autentica realidad, pues no se apega a ideas preestablecidas, sino que se apega a las pruebas y evidencias sustentables y corroborables, aunque estas rompan con el conocimiento del pasado.
La ufología contemporánea no necesita de fe, la fe no sirve para eso, necesita evidencias y pruebas sustentables y corroborables abiertamente para todos. Las evidencias señalan que los “Mentores Siderales” son solo una estafa creada para suprimir la capacidad de razonar lógicamente de las personas. Esos falsos mensajes no son más que desinformación que solo sirve para mantener a las personas en un estado pobre de servilismo y mediocridad. En esos "mensajes canalizados" hay más mentiras que granos de arena en las playas del mundo. Las ilusiones "celestes" de estos tipos son como la estricnina, que es bellamente transparente, pero mortalmente venenosa. No pueden tapar la luz del Sol con su dedo, y aunque cierren los ojos, el Sol seguirá brillando. Quien quiera saber la verdad, que abra su mente y que pregunte por ella, quien solo desee creer en mentiras, que deje de pensar.
Que Dios bendiga a los extraterrestres y que los libere de contactar con esos timadores.
He dicho.

Fuente: http://info7.mx:9000/editorial.php?id=1948

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