Vivir, no sólo existir .

La diferencia entre vivir y existir es el hecho de realizarse.

En la vida hay tantos caminos como estrellas, hay tantas oportunidades como granos de arena, la diferencia radica en escoger la senda adecuada y recorrerla de la manera correcta.
En las calles podemos ver todos los días gente que intenta escapar de sus obligaciones simplemente porque no les agradan o las consideran injustas. Pero la verdad es que el camino será mejor entre más piedras le quitemos nosotros mismos, sin que estemos esperando que otro venga a ayudarnos.
Debemos de ser un poco más de lo que aparentemente somos; es decir, "ponerle un pedacito del alma a las cosas que hacemos, pues esto en lugar de empequeñecer al alma la engrandece".
Por su sensibilidad el artista se convierte en un ser distinto al resto de la humanidad, él plasma sus pensamientos, sentimientos y recuerdos en obras multiformes. Un ejemplo de esto podría ser el escultor regiomontano Aldo Sánchez, Director del Centro Cultural "Cronos", quien tiene más de 20 años de dedicarse a la escultura en plastilina.
Un material simple y relacionado sobre todo con los niños, pero ¿quién no fue niño? Su obra, hoy muy apreciada como "el nuevo arte regio", es considerado por muchos de los escultores revolucionarios de Monterrey. Aldo Sánchez hizo que un material "infantil" se convirtiera en obras de arte. ¿Cómo? Dándole un poco de su alma de artista.
Algunos han de pensar "Yo no soy artista, yo no puedo hacer las cosas bien o con dedicación, eso sólo lo hacen los artistas". El ser artista no es otra cosa que ser un perfeccionista en su profesión; no se necesita ser escultor o poeta para ser artista.
El ser artista es una forma de ser, una forma de vivir, no simplemente de existir, de ser un numero más en el padrón electoral o en los registros de población. Hay ingenieros, médicos y abogados a quienes se les puede llamar artistas, pues son perfeccionistas en su manera de ser, buscan elevarse más en su profesión, desarrollarse como personas con el único fin de realizarse en la vida.
Debemos buscar se artistas de nuestra vida, escultores del destino, y no preocuparnos tanto cuando la "suerte" nos dé la espalda, pues le podremos "dar un puntapie a la mala suerte" y reírnos de ella. Los obstáculos son en realidad oportunidades para demostrarnos lo capaces que somos.
No existen mayores límites que los que nosotros mismos nos imponemos; sin embargo, nunca faltará quien diga "los humanos no somos perfectos, pues tenemos muchos defectos"; pensamiento demasiado pesimista.
Es cierto que no somos perfectos, pero somos perfectibles, o sea que nos podemos acercar a ese estado, y por lo mismo podemos indefinidamente estar creciendo y desarrollándonos más y más todos los días de nuestra existencia. Y por lo mismo que no somos perfectos, nuestro desarrollo hacia ese utópico estado no tendría límite.
El pesimismo es el límite, haz de tu vida una obra de arte, y vive de esta manera. No seas un número, se alguien.