27 noviembre 2013

Ufólogos en crisis



Como ya sabemos, gracias a los avances de la ciencia, se les están acabando los casos para investigar a los autonombrados “ufólogos” del mundo; pues por el progreso tecnológico se esta demostrando que la investigación del fenómeno ovni no tiene mucho futuro. ¿Por qué? Simplemente porque el “fenómeno” y los “casos” de ovnis están encaminado a su extinción.

Los que por años hemos salidos a la calle y al campo, o que incluso entramos a laboratorios, para buscar respuestas a toda la parafernalia relacionada al tema de los ovnis (objetos voladores no identificados), hemos encontrado que ese 99% de los casos para nada son ovnis, y que ese 1% no tiene nada que ver con algo que se pudiera calificar de “extraterrestre”. Algo que incomoda en sobremanera a los que sustentan su fama, y sus negocios, en presuntos casos de avistamientos de ovnis, llamados por ellos “naves extraterrestres”.

De hecho, como ya lo hemos mencionado, se ha logrado descartar muchas las supuestas hipótesis de presencia extraterrestre en el pasado, o en el presente, pues las evidencias presentadas no son sustentables ni pasan las mínimas pruebas de objetividad. De hecho ya se ha estudiado el denominado “síndrome del contactado”, ese padecimiento patológico en el que los individuos creen firmemente haber sido contactados, o canalizar mensajes, de seres extraterrestres o de otras “dimensiones”. Según algunos, esto se podría originar por una profunda depresión causada por un enorme abismo existencial en la vida de los afectados, lo cual origina la alucionación de que son “contactados” para así satisfacer su necesidad de ser tomados en cuenta por otros y sentirse importantes. Esta es una explicación psicológica, aunque también podría haber causas de origen psiquiátrico o neurológico.      

Hoy sabemos que los ovnis fortuitos, que tanto le gustan a algunos pseudo-ufólogos, pseudo-investigadores y pseudo-periodistas, solo se tratan de simples aves, globos y demás objetos comunes y corrientes que es llevado por el viento. Muchos piensan que esto es un ataque a sus creencias en el “fenómeno extraterrestre” como algunos le dicen, pero en realidad es una exigencia de seriedad y objetividad, exigimos resultados no más charlatanería y timos para mistificar de más un fenómeno que ya debería de haber sido descartado de los denominados temas de misterio.

Los extraterrestres o alienígenas de existir en alguna parte del universo y que entraran en contacto con la humanidad, ya no serían campo de estudio de los ufólogos, pertenecerían al campo de trabajo de los astrobiólogos, y de ser seres civilizados sería el campo de trabajo de los expertos en relaciones exteriores o comunicación social, para así establecer una buena y sana relación con ellos. La llamada “exopolítica” no tiene nada que ver con este campo, pues solo es una corriente más de los fanáticos de los extraterrestres que solo difunde desinformación mistificante que busca confundir y distraer a las personas.

Los investigadores de los ovnis tendrán que dejar de lado esta actividad, pues toda la evidencia puesta a prueba ha señalado que no hay nada que investigar o estudiar, lo que sí vemos es un curioso fenómeno social que denota esa soledad que hay en esas personas que necesitan de seres de otros mundos para poderse sentir, de alguna manera, “especiales” o “importantes” para algunos grupos dentro de la sociedad.

Los necios siempre apoyan, sin dudarlo, todo lo que les haga sentir bien o con lo que se sientan identificados, aunque eso sea falso, y atacaran a todo aquel que cuestione eso, aunque hacer eso a final de cuentas les perjudicará, pues el vivir en la mentira siempre trae malas consecuencias.

¿La ufología funciona actualmente? La respuesta es no, ya no funciona como proto-ciencia que llegó a ser en su momento, ahora solo vuelve a ser una pseudo-ciencia que no estudia ni investiga nada, pues la gran mayoría de sus supuestos casos, de antemano, ya están resueltos pues no esconden ningún misterio.

Fuente: http://www.info7.mx/editorial.php?id=4139

20 noviembre 2013

Epístola a los comunicólogos


“El auténtico poder solo se demuestra ayudando a los demás a crecer”.

Estimados compañeros:
Antes de comenzar me gustaría plantear el siguiente cuestionamiento, ¿por qué estudiamos comunicación? ¿Por qué no otra carrera?

Siendo médicos salvaríamos vidas; como abogados haríamos cumplir las leyes; siendo policías velaríamos por la seguridad de los demás y de nuestros seres queridos; como científicos investigaríamos en las distintas ramas del saber humano y contribuiríamos con el desarrollo de nuevas tecnologías; y es más, siendo políticos podríamos obtener algún puesto encumbrado.

Pero no, quisimos ser comunicólogos, estudiosos de la comunicación. Pero que lastima me dan aquellos que escogieron esta carrera pensando que es una carrera sencilla en la cual no se esfuerza uno, que la escogieron porque querían algo fácil, o porque no sabían que estudiar y pensaron que la comunicación era nada más salir en la televisión o hablar en la radio.

Me causan, hasta cierto punto, un poco de simpatía los que estudian comunicación únicamente pensando en llegar a ser unos simples gerentes o directores de una empresa. Buen objetivo, pero no lo suficiente.
Los que verdaderamente me enorgullecen son aquellos que entraron al mundo de la comunicación con el fin de ser líderes y no simples jefes. Los jefes se limitan a dar ordenes y a supervisar lo exigido, pero no siempre les interesa ser mejores; en cambio a los líderes sí les interesa el desarrollo.

Nosotros los que hemos escogido el difícil camino de la comunicación, debemos de estar conscientes de que representa mucho más que el simple proceso de emitir y recibir un mensaje; pues de ese mensaje pueden depender miles de cosas. Qué tan importante y poderosa no será la comunicación, que por medio de ella se puede dar inicio a las más bellas de las expresiones artísticas y que haga fluir del alma humana los más puros sentimientos, o incluso salvar una vida. Pero de la misma manera, por medio de la comunicación, se puede generar el odio más desenfrenado entre las masas, generando el deseo de destrucción entre los semejantes por insignificantes diferencias de pensamiento, llegando a desencadenar el más horroroso de los holocaustos.

Pero ¿cuál es el fin de nuestra carrera? No es solo el estudio de la comunicación, ya que así como es una ciencia, es también un arte, por lo mismo es perfeccionable, y eso nos obliga a ser perfeccionistas con nosotros mismos.

Como comunicólogos tenemos que estar conscientes de la enorme responsabilidad que recae sobre nosotros, pues de nosotros depende el efecto que provocará un mensaje en la multitud o en una sola persona. Y claro debe estar en nosotros el hecho de que el efecto que debemos buscar es el del crecimiento personal de todo aquel que nos ponga atención, pues debemos de ser, por añadidura, desarrolladores del conocimiento y de la cultura; pues hay que recordar que si la humanidad ha llegado a ser lo grandiosa que es, es por medio de la transmisión del conocimiento de los nuevos descubrimientos que ha hecho el ser humano durante su existencia.

¿Quién es más poderoso, el que tiene el poder o el que lo utiliza para el crecimiento de los que lo rodean? Los seres humanos existimos para crecer y desarrollarnos en todos los aspectos de la vida, y para todo ello nos tenemos que comunicar. Comunicamos pensamientos y sentimientos, los cuales son un reflejo de nosotros, pero además del simple hecho de ser transmitidos, deben de llevar intrínsecos en ellos el deseo de beneficiar, en algo, a quien lo recibe.

Nosotros estamos designados a ser líderes, no simples jefes; debemos de ser facilitadores del progreso humano y no simples críticos del acontecer diario, que solo opinan pero que su actitud es la misma que las de las rocas, sólo ver pasar el tiempo sin hacer nada, y estorbar.

Podemos, y debemos, ser los conductores del desarrollo humano y de la sociedad, creciendo en conocimiento, enalteciendo nuestros valores y siguiendo hacia adelante, con la firme idea de superar todo lo que se nos presente, pues eso será una prueba fidedigna de la capacidad que tenemos para ser más y mejores día con día.

La comunicación es solo la herramienta, tú eres el constructor del futuro.

Fuente: http://www.info7.mx/editorial.php?id=4125

09 noviembre 2013

¿Se acerca el fin de la ufología?


La pregunta le ha de incomodar a más de un aficionado al tema de los ovnis y los extraterrestres, y no faltará el que se rasgue las ropas ante tal cuestionamiento. Pero es una realidad que se puede ver en muchas, si no es que en casi todas, las páginas web dedicadas al tema de la ufología. Y saben ¿cuál es su principal problema? Respuesta: Los ovnis están en peligro de extinción.

Así es mis estimados lectores, el objeto principal a lo que los investigadores se dedicaban en esta proto-ciencia está desapareciendo. Los auténticos ovnis u objetos voladores no identificados, hoy e día solo representan, muy apenas, el 1% de los reportes de avistamientos, y de ese 1% ninguno tiene tintes de ser de origen extraterrestre, como inicialmente se postulaba en la ufología, allá por los años 1960´s y 1970´s, y que era lo que más llamaba la atención en esta materia.

Afortunadamente, gracias al avance científico y tecnológico, hoy en día sabemos que ese 99% de los casos de presuntos ovnis han terminado en simples engaños de los pseudo-investigadores o errores de los testigos. Tras las revisiones de cientos de fotografías, videos, testimonios y supuestas investigaciones, han puesto en evidencia que la ufología contemporánea está en crisis por falta de objetos concretos de estudio, y lo que es peor, la falta de objetividad y seriedad de los supuestos y autonombrados ufólogos..

En años anteriores muchos falsos investigadores alegaban que “no se puede repetir el fenómeno ovni en un laboratorio”, algo que quedó totalmente refutado en cientos de ocasiones, al grado de que llegó el momento que se volvió una moda el subir imágenes de supuestos ovnis y extraterrestres a la red, era parte de las bromas virales de muchos jóvenes programadores de computadora y diseñadores digitales, pero que los pseudo-ufólogos utilizaban, según ellos, para demostrar que “los extraterrestres ya están en la Tierra”; algo que también ya fue desmentido.

Con el paso del tiempo, y en vista de que los aparentes ovnis que aparecían en las imágenes proporcionadas por la gente no eran lo suficientemente buenas para llamar la atención de los fanáticos ufofilos y ufomaníacos que en todo quieren ver naves alienígenas, algunos “investigadores” voltearon a ver a los fenómenos que ocurren en el espacio exterior para ampliar su campo de especulación y poder generar más suposiciones intangibles.

Pero se toparon en seco cuando los auténticos especialistas en el campo de la astronomía y las investigación espacial comenzaron a dar sus opiniones sobre sus afirmaciones que decían que ciertos “objetos extraños” que eran captados por las distintas sondas, satélites y naves espaciales, se trataban de ovnis o naves extraterrestres. Fue cuando todos ellos chocaron ante la simple cuestión de que todo fenómeno que existe en el cielo y en el espacio tiene su explicación racional y científica. Todos esos videos de chatarra espacial y pequeños asteroides pasando frente a la lente de cámaras puestas en el espacio fueron desmitificados, dejaron de ser ovnis, pasaron a ser simples objetos de origen normal.

Un caso reciente es el del cometa ISON que está próximo a pasar cerca de la Tierra y que podra ser visto a simple vista. Unas personas “filtraron” unas imágenes falsas donde se ve al cometa acompañado de otros dos objetos desconocidos, y no faltó el ufólogo que opinó diciendo que eran naves de otros mundos, y otros igual de tendenciosos aseguraron que esas imágenes provenían de una agencia secreta estadounidense para desviar la atención de las personas. Parece que olvidaron que el secretismo en los ovnis por parte de los gobiernos terminó hace muchos años, al ver que los ovnis no representan ningún riesgo de seguridad para alguna nación.

No faltó el ufólogo que se puso a producir sus propios videos y fotografías de ovnis fortuitos con tal de captar algo de atención, lamentablemente para ellos se descubrió que todos, sí todos, eran simples trucos de mal enfoque de la cámara y reflejos mal interpretados intencionalmente para dar a creer que se trataba de ovnis. Muchas supuestas oleadas ovni así surgieron, de invenciones de los mismos aficionados al tema que contribuían a la mistificación del tema, algo que en lugar de ayudar, perjudicó mucho.

Incluso algunos pseudo-periodistas intentaban inventar notas “de ocho columnas” con videos falsos de ovnis y “entes extraños” captados por supuestos testigos (colaboradores de ellos) que solo buscaban fama momentánea, y no se diga de recurrir a personas que padecen del síndrome del contactado, esa patología psicológica y/o psiquiátrica, que hace que algunas personas aseguren haber estado en contacto con seres extraterrestres, casos que quedaron descartados pues ninguno aportó evidencia sustentable de dicho evento, y muchos de ellos eran viles fraudes.

Y no podemos dejar de lado los casos de los crop circles o círculos de las cosechas que tantas ganancias han dejado a los supuestos investigadores que en lugar de investigarlos de manera inquisitiva, se ponen a promoverlos como si fueran pruebas de comunicación con civilizaciones de otros planetas, algo que también ya fue demostrado que es completamente falso, y que incluso en la red se puede comprar un par de manuales de como manufacturar complejas figuras en un par de horas.

Es lamentable que esos defensores de la ufología olvidaran que el principal objetivo de la ufología es desmitificar al fenómeno ovni, confirmar o refutar su existencia, esa es la autentica ufología, algo que muchos de ellos terminaron vejando y tirando a la basura. Por eso hoy muchos investigadores verdaderos prefieren no ser llamados ufólogos, pues ese termino ha sido muy degradado por muchos timadores que se ostentan como tales, por si fuese poco, ahora este estudio es llamado “investigación de los fenómenos aéreo espaciales extraordinarios” un nombre más formal y serio que le da nuevos bríos a este campo de estudio.

Si así como la pseudo-ciencia de la alquimia quedó obsoleta en su momento, y abrió el paso a la ciencia moderna de la química, hoy posiblemente estemos viendo esa transición de la ufología a una nueva ciencia que se dedicará a indagar en esos fenómenos que, de momento, no tienen explicación, pero por el simple hecho de ser de nuestro mundo tienen que tenerla. La ufología está pasando por un momento decisivo, o se renueva o desaparece. No tienen otro camino.

Fuente: http://info7.mx/editorial.php?id=4102

04 noviembre 2013

Se realizará simposio internacional sobre fenómenos extraordinarios en Morelia


El que puede ser el evento más importante de México, dedicado a la investigación del fenómeno ovni, paranormales y demás temas de misterio, se realizará los días 15 y 16 de Noviembre, en Morelia, Michoacán; se trata del 5o Symposium Internacional de Estudio y Análisis sobre Fenómenos Aéreos y Extraordinarios.

Será en el auditorio del Poliforum Digidal, el cual es organizado por el Colectivo Esfera Azul, un grupo que ha destacado a nivel internacional por la calidad de sus investigaciones en este campo.

“El conocimiento es y debe ser libre para todos, por lo que este magno evento será completamente gratuito”, así lo comentó el investigador y arquitecto Salvador Mora, quien es el líder del Colectivo Esfera Azul.

En el evento participan los investigadores más relevantes de México, además de contar con la participación de Rubén Uriarte, de EUA, y Hernán Bado, de Argentina. En el simposio, se realizarán conferencias, talleres y mesas de análisis sobre distintos temas. Se espera la asistencia de muchos interesados en estos temas, desde simples aficionados hasta escépticos, para lograr tener una lluvia de ideas y opiniones que hagan que este campo de estudio siga avanzando y no se estanque ha ocurrido en años anteriores.

*Video promocional del evento: 
http://www.youtube.com/watch?v=-4DiARc_Cmo

01 noviembre 2013

Crónicas de taxistas nocturnos


En estas fechas tan relacionadas al Día de Muertos, me vienen a la memoria varios relatos que me han compartido taxistas que recorren por las noches la ciudad de Monterrey, y aunque ellos no se dedican a eso, tienen más suerte que algunos que se dicen dedicar a “cazar fantasmas”, para encontrarse con fenómenos que por momentos ponen en duda los límites de lo natural y lo preteratural. Este día, junto a la luz de una vela, les comparto algunas historias de misterio de taxistas regiomontanos.

Una tarde de octubre un taxista circulaba por la Carretera a Nuevo Laredo, iba con rumbo a Sabinas Hidalgo a la casa de unos familiares, ya estaba por caer la noche y no quería que la oscuridad lo atrapara en la carretera. De pronto vio a la orilla de la carretera a una mujer de ropas humildes hacerle señas para que se detuviera, era morena con rasgos indígenas, como de unos 40 años, y con un reboso negro se cubría su cabellera. El taxista ya iba algo retrasado para llegar a su destino, por lo que hizo caso omiso a las señales de la mujer dejándola atrás, sola en la carretera, a gran velocidad. La seguía viendo por el espejo, pero al pasar una loma la perdió de vista; pero de pronto del asiento de atrás, literalmente, apareció la mujer que había dejado en la carretera, y manoteando le reclamaba a gritos “¿Por qué me dejaste sola en la carretera? ¿No ves que estaba sola? ¿Por qué no me querías llevar?”.

El taxista sorprendido y asustado, dio un frenón que dejó las llantas de su carro pintadas en el asfalto por varios metros, pero apenas se detuvo el carro, él se salió corriendo del vehículo espantado por aquella aparición. Pero al ver el taxi, el chofer se percató que estaba solo el vehículo, no había nada ni nadie dentro, completamente solo estaba en la carretera. Al llegar a la casa de sus familiares, con gran asombro lo recibieron, pues literalmente había envejecido del susto, su pelo se había vuelto canoso y casi no podía hablar. De la misteriosa mujer que “se le subió”, le dijeron que murió hace muchos años y nunca llegó a su destino, por eso siempre pide que la lleven, a quien no la levanta se le aparece en el camino en el asiento trasero, pero a quienes sí se la llevan, más adelante se les desaparece, dándoles las gracias por haberla llevado.

Una noche de noviembre un joven taxista circulaba por calles del Barrio Antiguo, de pronto una señora muy elegante vestida de negro, como de unos 50 años de edad, le hizo la parada y le pidió que la llevara al Panteón del Carmen, que está del otro lado de la ciudad y es uno de los más antiguos cementerios. Todo parecía normal, el taxista conducía con precaución pues la mujer parecía ir rezando y no quería incomodarla. Al llegar al panteón, el taxista se estación en la puerta principal, y se percató que la puerta estaba cerrada. La mujer se bajó y le pagó con un billete, y le dijo que podía quedarse con el cambio. El joven chofer le dijo que si no quería que le acompañara pues ya era muy noche y el cementerio estaba solo. Pero ella le contestó “No se preocupe joven, yo aquí vivo”. La mujer dio media vuelta y se fue caminando directamente a las puertas del panteón, pero no se detuvo ante las rejas de acero que impedían el paso, como si fuera una sombra las atravesó y siguió caminando como si nada, y unos metros más adelante, bajo la luz de la Luna y unas viejas luminarias su silueta se evaporó.

El taxista impresionado rápidamente enderezó su vehículo para iluminar con las luces de su carro el camino por donde se fue la mujer, pues no podía creer lo que había visto, pero el camino principal del panteón estaba solo, y la reja con candado, nadie podría entrar o salir. El taxista se puso histérico del miedo, pero de pronto, de entre las tumbas salió otra silueta con una lampara, era el guardia el panteón. El joven desesperado le contó su relato, pero el guardia saco un cigarro y tranquilamente se puso a fumarlo frente a él, y le dijo “Ella murió hace muchos años, pero siempre se sale a pasear en estas fechas, pero se pierde, por eso siempre pide que la traiga un taxi, pero lo bueno es que sí les paga”. El joven taxista guardó por mucho tiempo ese billete, con el cual la “muerta” le pagó su retorno al panteón.

Yo no digo que las crean, solo les digo que hay personas reales que aseguran que las vivieron, en su momento fueron casos impensables y sorprendentes. Hoy solo son leyendas, relatos de misterio que algunos taxistas se atreven a compartir mientras atraviesan de noche la ciudad, pensando que posiblemente hay algo más allá de lo que conocemos, y que es muy sencillo no creer en ello, hasta que te lo topas de frente, a un lado del camino.  

Fuente: http://info7.mx/editorial.php?id=4091